¿La humanidad iría desapareciendo?
Sí claro; mira a tu alrededor, lee las noticias y obsérvate tal vez en un espejo. Quienes van dejando a un margen de su vida la meta de vivir en Matrimonio, de formar una familia y toman el sexo y los años para el placer, el disfrute y la vanidad, los ver llegar a adultos sin hijos. ¿Y si todos hacen lo mismo?
Hay países como Japón y China, que actualmente están prendiendo la luz de alarma, pues la población se ha envejecido, no hay quien ocupe los puestos de trabajo, no hay niños que releven el enorme porcentaje de la población que va en retirada y desaparición.
Respecto al Matrimonio muchos dicen: “Yo hago las cosas a mi manera”. Así dice el mundo de manera creciente ante los mandatos de Dios; la gente hoy es cada vez menos cristiana y más atea. Muchos gustan más de entregarse en los engañadores brazos de Satanás que en los seguros brazos de Dios.
Camina hoy la sociedad hacia un vertiginoso proceso de paganismo; la perversión se hace común y se generaliza. De manera abierta muchos se revelan contra los mandatos de la Iglesia o simplemente tratan con total indiferencia y desprecio todo cuanto ésta les diga; no ven que ésta les procura la protección con sus orientaciones y advertencias. Cada quien anda fabricándose un dios a su propio gusto y conveniencia.
Se le cierran las puertas, a como de lugar, al matrimonio eclesiástico pero se presiona para que se abran de par en par todas las puertas de las leyes en los Estados y se permitan el aborto, el lesbianismo, el homosexualismo en la vida conyugal, entre otros. Vuelven los tiempos de Sodoma y Gomorra; sólo que tal vez pintados de mayor arrogancia modernista y de mayor orgullo y vanidad en los humanos.
El hombre pretende ahora decidir por Dios:
Hay una visión desvirtuada de Dios...:"Dios es bueno y me debe aceptar lo que me gusta, lo que yo pienso, lo que yo quiero, porque Dios es bueno y comprensivo".
El matrimonio tiene su origen en Dios; visitemos ahora la Biblia y dejemos que la Palabra de Dios sea quien nos transforme el propio modo de pensar y actuar:(1)
Es ordenado por Dios: Gn 1,28; Gn 2,18; Tob 8,5-7; Mt 19,6.
Es análogo a Cristo y su Iglesia: Ef 5,21-23.
Dos en una sola carne: Gn 2,23-24; Mt 19,3-6; Ef 5,31.
Los cónyuges deben respetarse mutuamente: 1Co 7,4; Ef 5,21-25; Ef 5,33; Col 3,18-19.
La unión es santa: 1Co 7,13-14; Ef 5,25-26.
Para la procreación de hijos: Gn 1,28.
La continencia es buena por períodos breves: 1Co 7,1-5.
Los hijos son una bendición de Dios: Gn 24,60; Gn 30,1-3; Sal 127,3; 1Sam 1,6; Lc 1,25.
El divorcio no está permitido: Mt 5,32; Mt 19,9; Mc 10,2-12; Lc 16,18; 1Co 7,10.
La muerte disuelve el matrimonio: Rm 7,2; 1Co 7,39.
El celibato es un llamado más alto: Mt 19,12; 1Co 7,8; 1Co 7,25-26, 1Co 7,38.
El amor es hermoso, pero es frágil y hay que cuidarlo con un buen Protector. Son prudentes y no se confían a sí mismos la garantía de la durabilidad en la relación porque saben que son humanos y fallan, y que Satanás no descansará tentándolos para romper y destruir esa relación. Por eso, se consagran y le piden a Dios a través del Sacramento del Matrimonio que su GRACIA sea la que los proteja siempre unidos y en fidelidad. Aunque son adultos, viven aún como niños dependiendo de Dios, entregando en Él su apoyo y su seguridad.
Satanás seduce a las parejas a no casarse por la Iglesia para llevarlos a la inestabilidad matrimonial, de los compromisos para siempre; para mantenerlos débiles sin posibilidad de desatarse de los pecados que cometan (no confesarse) y sin poder nutrir su relación conyugal entrando en comunión con el Cuerpo de Cristo (no comulgar). El terreno queda servido para facilitarle a Satanás el riesgo del divorcio y dejar inseguros a los hijos.
1) Este tema fue tomado de: e-Sword: The sword of the LORD with an electronic edge., Concordancia doctrinal católica; Matrimonio.
1) Este tema fue tomado de: e-Sword: The sword of the LORD with an electronic edge., Concordancia doctrinal católica; Matrimonio.
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