martes, 5 de marzo de 2013

DICEN: “LA IGLESIA CATÓLICA NO ES DE JESUCRISTO PORQUE SE PAGANIZÓ CON CONSTANTINO”.



Basta con recordar que está escrito en la Biblia que la Iglesia es el mismísimo cuerpo de Cristo para darse cuenta de la gravedad de tal tesis. Se le está diciendo pagano al Cuerpo de Cristo, es decir, a la Iglesia. Al pregonar tal afirmación se le está diciendo a Jesucristo que no sirvió lo que hizo, que fracasó, que mintió al decir que las puertas del infierno no prevalecerían contra la Iglesia que fundó (Mt 16,18).

Le están diciendo a Jesucristo que le mintió a los Apóstoles cuando les prometió que estaría con ellos todos los días hasta el fin del mundo (Mt 28,20) y que engañó a la Iglesia en Pentecostés dándoles un Espíritu Santo (Jn 14,26; 16,13; 20,22)  que no servía o que luego cambió de opinión y se lo retiró.

¿Dónde quedaría la fidelidad de Jesucristo y el poder del Espíritu Santo para asistir y proteger la Iglesia? ¿Dónde queda lo que dice Nm 23,19? ¿En qué parte de la Biblia está escrito que Jesús renunció a la Iglesia que fundó? ¿Cómo no darse cuenta con tantas mentiras juntas que no son nuestros hermanos esperados los que están detrás de tantas graves ofensas a nuestro Señor Jesucristo sino  Satanás? Jesucristo es fiel, Él no muda su Palabra y lo que dice no caduca. Se puede demostrar que es obra de Satanás porque en nuestros hermanos esperados lo que hay es ingenuidad, desinformación, actuación por prejuicios. 

Dios sí dio una fuerte lección, pero nunca renunció a Israel, como pueblo elegido suyo, por el pecado de idolatría cometido con el becerro de oro (Ex 32,14; 34,6-7) y Jesucristo nunca expulsó a Pedro por sus negaciones (Lc 22,54-62); tampoco a Judas por su traición (Lc 22,48; Jn 13,27), ni a Santiago y Juan por seguirlo interesadamente (Mc 10,35-45). Él siempre les dijo la verdad, los confrontó, mas no los expulsó. Algunos creo que se creen con mayor autoridad que Jesucristo para expulsar de sus vidas a la Iglesia Católica por los pecados de sus miembros; creo que aún no se han visto en un espejo.

¿Acaso no se dan cuenta nuestros hermanos esperados que fue Satanás quien les hizo dar un paso en falso que nunca Jesucristo dio ante los pecados que su Iglesia cometió y que todo ocurrió a causa de su debilidad en la fe y a la fragilidad de aquel momento que estaban viviendo cuando decidieron irse?

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